19/1/12

Great minds think alike?

Este es un post insignificante y anecdótico que escribo porque no me apetece seguir estudiando.
En la vida hay situaciones a las que tienes que darles la vuelta un par de veces para que te parezcan graciosas.

Estudiar una carrera o un máster que implique creatividad es muy bonito, porque puedes expresar tu yo interior y autorrealizarte como ser humano, ser un individuo pleno, y demás mamarrachadas. En los trabajos de grupo generalmente no es así, y una idea pequeña que surge de uno va creciendo con el feedback y el brainstorming y todas esas palabras extrañas hasta hacerse grande y entre todos creáis algo que en realidad no es de nadie. Bueno, es vuestro, pero no existe, es sólo un proyecto.


Si alguna vez se me ha pasado por la cabeza trabajar en televisión es para producir un programa tan brutal como Xuxa Park. La televisión infantil ya no existe, son los padres.

El curso pasado tuve una asignatura de producción televisiva donde un grupo de otros 4 compañeros y yo hicimos una mini biblia de un programa inventado como proyecto final de la asignatura. Este programa tenía que explicarse en un pitching durante la última clase al resto de los compañeros y a ciertas personas de la selecta industria audiovisual valenciana (selecta porque sólo unos pocos de todos los que se gradúan en nuestras universidades pueden trabajar).

Desarrollamos nuestro programa. El profesor nos ayudó. Redactamos todo el proyecto. Expusimos el proyecto. Fuimos evaluados. A las personas de la selecta industria audiovisual les gustó, mostraron interés y pensaron que habíamos hecho un buen trabajo.


Finders Keepers (Nickelodeon), una de nuestras mayores influencias para el programa

Nuestro progama se llamaba Hogar loco hogar. Queríamos rescatar aquellos fines de semana pegados al televisor con Xuxa Park, Megatrix o el Club Disney de nuestra antigua televisión. Básicamente era un concurso físico muy colorido orientado al público infantil y juvenil, que se emitiría por la mañana los sábados (eh, hicimos análisis de audiencias y de todo). Había una presentadora chica muy mona y carismática y un presentador chico (Daniel Diges, fuck yeah). El elemento protagonista del concurso era una casa gigante que ocupaba todo el plató y alrededor de la cual se desarrollaban todas las pruebas (con tirolina, casa del árbol y ático incluído). Las pruebas, físicas y de conocimientos, implicaban a los dos equipos participantes (familias de dos adultos y dos niños), y giraban en torno a la idea de hacer de las tareas domésticas algo divertido. Por ejemplo, había un juego de cazar tartas, otro de un circuito donde había que recoger cosas montado en triciclo... en total unas 10 pruebas diferentes para cominar 3 en cada episodio. Queríamos "volver a juntar a la familia delante del televisor" y "reforzar los valores de cooperación en las tareas del hogar". El equipo que ganaba las pruebas eliminatorias llegaba a la prueba final, que consistía en que los dos niños, mediante relevos, tenían que buscar por toda la casa la llave que abría un cofre mágico, donde estaba su premio (VIAJE A DISNEYWORLD :-D). Tampoco voy a entrar en más detalles, que es un rollo, y además no tengo el trabajo final digitalizado y no puedo revisarlo ni subirlo.


Como diría Tyler, todo es una copia, de una copia, de otra copia.

El caso es que el otro día dos de mis queridas amigas y compañeras de equipo me dicen que ha salido un programa clavado al que nosotros expusimos. Y que lo están emitiendo en la televisión española. Lo primero que hago es arder en odio porque pienso que nos lo han copiado. Todo apunta a una respuesta afirmativa. Empiezo a imaginar mi vida como millonaria al ganar el juicio por plagio contra ellos. Pero resulta que, ignorando las sugerencias de nuestros profesores, no habíamos registrado nuestro proyecto y, por tanto, no podríamos denunciarlo. Me describen el programa y suena putamente idéntico. Ardo más.


XXS: nuestro programa hecho realidad.

Pero hoy hemos estado investigando hasta encontrar el dichoso programa. Se llama XXS. Y no nos han copiado nada porque es un puñetero programa-franquicia, de estos tipo Big Brother que puedes comprar tal cual como un paquete y producir en tu país la idea de otros. Lo mejor de todo es que el programa es prácticamente CALCADO y nosotros ni sabíamos que existía, hasta el punto en el que ahora pensábamos que ellos nos habían robado el programa a nosotros...

Básciamente, es como habríamos hecho nosotros el programa (aunque creo que no tienen a unos adorables abuelitos cocineros como los que propusimos) si hubiéramos podido hacerlo. Hasta estuvimos valorando poner como presentadoras a Pilar Rubio o Patricia Conde, pero las desechamos porque nos saldrían caras, ¡y no queríamos guarronas en un programa infantil! (Aunque a Xuxa no le fue mal...). En fin, casualidades de la vida.


Leyendas del Templo Escondido, otro concurso chulísimo al que me viciaba de pequeña.

Conclusión. Que great minds think alike, sí.
Pero cuando haces un proyecto en el que crees y lo expones ante un público (o no), has de registrarlo. Porque la pela es la pela. Y te lo puede no mangar nadie, o te lo puede mangar un cazatalentos o te lo puede mangar un compañero. Y luego vuestra idea resulta que era su idea. Supongo que todos ustedes han visto la fantástica The Social Network.
Así que, que sirva como moraleja.

Yo ahora voy a engancharme a XXS, este programa tan GUAY y bien pensado. Aún no he visto el piloto completo pero vamos, ya puedo decir que son unos genios.

Si algún responsable de Mediaset me lee, que se ponga en contacto conmigo, que quiero resucitar a la televisión infantil y ya puede ver que pensamos de forma muy parecida.
Guiño, guiño.

0 comentarios:

Publicar un comentario